miércoles, 19 de noviembre de 2014

25 MESES

demasiado. A veces, no soy capaz de mirar tus fotos. A veces me muero de injusticia. Me muero de pena y te echo tanto de menos que me cuesta seguir. Pero cada vez mas rápido, me vuelvo a levantar, pensando en tu sonrisa, en como eras, en tu optimismo y tu amor por todos los detalles. Esos detalles que hacen que la vida sea mas bonita. Y tu. Tu. Solo tu me haces volver a levantarme. Cerrar el cajón de la pena y guardarlo todo para cuando me apetezca llorarte. Llorarte me libera también. Pero cada vez mas me libera ser feliz por ti. Esther pequeña es tu sonrisa. Lo es. Por mas que se parezca a mi o a su padre, es tu sonrisa la que esconden sus ojos. Voy dando con ella todos los pasos que ella quiere. Disfruto de cada sonrisa como si fuera la ultima. Si algo me dejó tu partida, fue la lección aprendida de exprimir cada momento. Gracias. No se como protegerla de lo malo. Cuando tengo miedo, lo guardo también en mi cajón. Porque en realidad no puedo protegerla, como no pude protegerte a ti, y eso me asusta infinito…. Y sigo intentando convencerme que si no lo pienso, que si no pienso que no estas, ni en el miedo, ni en lo injusta que es la vida, nada va a pasar. Y que tu nos cuidaras. Y así, intentando pensar que nos proteges y nos cuidas, hemos decidido cambiar un poco nuestro futuro. Ahora es cuando me dirias, “tati, estas loca..” Si, estoy loca. Pero voy a hacer todo lo que quiera hacer. Para mi no es solo un dicho. Carpe Diem es mi credo. Así que vamos a abrir una tienda de novias y fiesta. Nuestro primer negocio familiar. Y tampoco vas a estar¡ Pero en parte es gracias a ti. Porque me has hecho valiente. Y sabes como he pensado que si puedes estar? Si tus amigas me dejan cojere esas fotos de sus bodas en la que estas tan prec iosa y estarán adornando alguna pared, como enseñándonos a todos lo guapa que se puede estar en una boda. Y podre mirarte cada vez que busque amor, consuelo y valentía.. Así que desde aquí les pido a tus amigas fotos de sus bodas contigo, que estarán en un rincón privilegiado de mi tienda. Dame toda la fuerza y el empuje que me darias si estuvieras aquí conmigo. Y protege a mi hija todo lo que no pudimos protegerte a ti. Permite que la lluvia nos moje los ojos para recordarte y que cuando caiga sobre el asfalto nos recuerde a ti siempre con una sonrisa… TE QUIERO MAS INFINITO CADA DIA QUE PASA

No hay comentarios:

Publicar un comentario