miércoles, 19 de febrero de 2014

y sigue el tiempo corriendo...

Si tati, el tiempo sigue pasando inalterable sin ti. Y yo aquí tan pequeña, que me quede sin alas cuando me dejaste y ya no se volar. Los vientos, las fotos, alguna que otra canción, y muchos otros detalles, me siguen dejando un nudo en la garganta. A veces miro tus fotos y creo que me voy a morir de pena. Que no es real, que no ha pasado. Tras 16 meses el dolor sigue aquí cada noche, no te voy a engañar. Todas las noches lloro un poquito por ti. Pero también tengo que decirte que Esther me ha traído mucha alegría, de otra manera. La mente esta hecha para esto. Recuerdos malos se llenan con momentos buenos, o nos volveríamos locos. Hoy estaba llorando mirando a Esther mientras le cantaba una nana que me recuerda mucho a ti. Y entonces ella me sonrío infinito. Como solo tu sabias, y entonces supe que ella vino a llenar el vacío que me dejaste. Con una sonrisa que ilumina como la tuya, y esos ojos tan llenos de vida. Tengo miedo de que le pase algo. Tengo miedo de que al quererla mas cada día..y que me la quiten. Desde que te arrancaron a ti de mi ese miedo ya no se va. Yo tengo el mismo miedo de todos los padres pero mas grande porque a mi ya me han quitado una vez a mi otra mitad. No quiero contarte muchas cosas porque cuando me pongo a contarte cosas me doy cuenta que la vida sigue, y me entrizteco mas. Sigo esperando sentir tu aliento en mi espalda, que llames por teléfono o aparezcas en mi puerta. Ya sabes que siempre tuve mucha imaginación. Me dejaste muy solita mi niña. Y cada día, mes, momento sin ti es un pedazo de vida que te llevas. No quiero dejar de escribirte ni un solo mes, no. Te quiero infinito